Sinopsis → Nacido de cero, para este e-commerce definimos desde el inicio un sistema de enlazado interno con sentido común basado en un máximo de 3 niveles de profundidad.
El objetivo logrado con este experimento ha dado como resultado la mejora en el posicionamiento SEO de no marca, por encima de la propia web corporativa.
Como norma general, solemos pensar que una web corporativa o marca paraguas debe estar siempre mejor posicionada en los rankings de Google que sus dominios hijos o submarcas.
Pero también hay excepciones a la regla.
En esta ocasión, vamos a explicarte cómo es posible superar a nuestra web paraguas en posicionamiento de «no marca» con un proyecto creado desde cero.
Esta web carece de visibilidad, posicionamiento, enlazado externo o cualquier métrica que te puedas imaginar. Solo presenta un análisis, organización y trabajo en conjunto.
Los antecedentes del proyecto
Como ya te hemos adelantado antes, el proyecto era totalmente nuevo, así que, tras la elección del dominio por parte de nuestro cliente, dábamos el pistoletazo de salida a toda la definición previa de la Arquitectura de la Información.
El primer problema que nos encontramos fue el tipo de categorización que tenía pensado el cliente para su proyecto.
Basándose en otras webs de la marca, quería replicar casi con exactitud el tipo de categorización por tipología de productos, sin tener presente que muchas de esas categorías que se pretendían replicar carecían de sentido para este nuevo proyecto.
Por ejemplo:
Este mapa conceptual muestra la idea inicial que se pretendía replicar. Como puedes observar, solo existen 3 URLs en un primer nivel de profundidad, dejando en nivel del 3 al 6 todas las categorizaciones y URLs de productos.
A este aspecto de la Arquitectura de la Información hay que sumarle que, por encima de las categorías principales, existía una «categoría madre».
Esta sección hacía de filtro para las categorías y subcategorías que colgaban de ella. Por ejemplo, «Descongelar y listo» sería la url del tipo 1, colgando de ella, nos encontraríamos todas las categorías que forman parte de ese sistema y así se subdividiría hasta llegar al producto.
El artículo se volvía a incluir en la familia del tipo 2, siempre y cuando ese producto también contase con esa cualidad/característica, generando así un enlazado complejo y nada usable tanto para los usuarios como para el boot.
Así que para demostrarle al cliente que debíamos apostar por un diseño novedoso y funcional, le propuse una nueva arquitectura basada en las intenciones de búsqueda de los usuarios.
El éxito de los primeros resultados obtenidos sirvieron para obtener la aceptación por parte del cliente. Dimos el siguiente paso: trabajar sobre la idea que desarrollamos en paralelo a la propuesta de nuestro cliente.
Llega una nueva propuesta de trabajo para la mejora del posicionamiento SEO del e-commerce
Basándonos en el estudio de palabras clave desarrollado al completo para cada una de las familias de productos, llegamos a una conclusión: los usuarios no buscaban primero un tipo de característica del producto y luego hacían otra consulta dentro del site para encontrar lo que estaban buscando.
Todo lo contrario; los usuarios buscaban el producto o familia de producto y, una vez que han accedido al site, mediante los filtros, navegaban hasta encontrar el artículo deseado.
Con esta premisa de consultas, dibujamos el primer esquema de la nueva web:
Con esta organización, le damos mayor importancia a las tipologías de producto que a sus características, ordenando el menú superior por tipo de alimento y orden lógico en una comida: aperitivos, panadería, pizzas, verduras, carnes, pescados y pastelería.
De este primer nivel, cuelgan las subfamilias propias de cada familia, quedando en un segundo nivel todas las URLs de subcategorías y en un tercer nivel las URLs de fichas de productos.
¿El resultado? Una reducción considerable del número de clics que un usuario debía hacer si quería consultar una subcategoría o producto en concreto.
Otro aspecto que fijamos en esta fase era la nomenclatura de las URLs. Hasta el momento y en el resto de webs que presentaba la marca, las URLs eran una suma de todos los pasos que había que hacer hasta llegar al destino.
Por este motivo, en las fichas de productos, podíamos encontrar 4 o 5 path como en el siguiente ejemplo:
www.dominio.com/descongelar-rapido/carne/albondigas/producto.html
Eran URLs demasiado largas y ahora teníamos la oportunidad de mejorarlas. Con la propuesta de optimización, nuestras URLs pasaron a ser:
- www.dominio.com/carne/
- www.dominio.com/carne/albondigas/
- www.dominio.com/producto.html
Al presentar bajo la carpeta/carne/ todas las subfamilias correspondientes, nos era mucho más sencillo identificar el total de URLs y así crear los segmentos técnicos en Google Analytics, para conocer el rendimiento de cada una de estas familias.
Una circunstancia similar sucede con las fichas de productos. Como son las únicas URLs que terminan en .html, podíamos crear un segmento estratégico y así saber el total de sesiones y conversiones que se iban realizando.
La respuesta positiva de Google ante los cambios
Con el esquema del menú definido y aprobado por el cliente, el siguiente paso era poner en marcha el enlazado interno, es decir, cómo enlazar internamente las URLs con carácter descendente, ascendente, horizontal o vertical.
Pero antes de entrar en materia, era importante saber cómo iba Google respondiendo a nuestro nuevo site.
Después de un periodo corto en el sandbox, el proyecto comenzó a ganar visibilidad.
Como podemos observar en la gráfica de Sistrix, la web pasó de presentar una línea estable y sin notables resultados, a nuestra fase de despegue.
Esa primera subida de visibilidad es fruto de una decisión sencilla – la ordenación de las categorizaciones en el menú -, ya que todavía no habíamos iniciado la fase de optimización y redacción SEO del contenido.
Desde el punto de vista del posicionamiento «no marca» en el top 10, la gráfica de incremento casa con la subida de la visibilidad.
Todavía no teníamos un gran volumen de palabras clave posicionadas, pero era cuestión de tiempo y trabajo que esta situación se modificara a nuestro favor.
Propuesta de enlazado interno
Como bien sabemos, existen varios sistemas de enlazado interno o interlinking. Cada uno es apto para las necesidades de cada web, por lo que lo que sirve para un tipo de site, no tiene por qué ser igual de válido para otra.
En esta ocasión, nos decantamos por implementar una estrategia en SILO, en la que su enlazado interno sería vertical, de arriba a abajo y viceversa.
Ventajas de implementar una estrategia en SILO:
- Toda página puede enlazar a la página de inicio y viceversa.
- Toda página de categoría puede enlazar con la home y viceversa.
- Toda página de subcategorías pueden enlazar hacia su categoría madre y home y viceversa.
- Todo producto puede enlazar con la subcategoría y categoría madre a la que pertenece y con la home y viceversa.
Una vez implementadas todas las mejoras onsite de nuestro enlazado interno entre categorizaciones, el dibujo final de nuestro sistema de navegación quedó de la siguiente forma:
Cuando se accede a una URL de subcategoría, dentro del propio contenido del html, enlazamos siempre a las hermanas de dicha subcategoría, nunca hacia otras subcategorías de otras secciones.
De esta forma, conseguimos mejorar el interlinking dentro de una familia de productos.
Resultados y conclusiones
Por fortuna, los resultados no tardaron en llegar. A las pocas semanas de la implementación de todo el enlazado interno comenzamos a notar cómo ciertas categorizaciones que, a priori no eran muy relevantes, empezaron a ganar fuerza y posicionamiento entre el top 10 de Google.
Ese avance nos animó a completar todo el estudio de palabras clave y su dotación de contenidos en el site.
Fíjate en el escenario anterior de nuestra distribución de keywords posicionadas, en las que apenas presentamos criterios de «no marca» en el top 10.
Y cómo en pocas semanas este escenario cambió por completo:
Tal ha sido la buena aceptación por parte de Google, que en estos momentos posicionamos gran parte de los criterios de «no marca» y con volúmenes de búsqueda interesantes por encima de la marca paraguas.
El resultado ha sido un incremento aproximado del 136% del posicionamiento SEO de este e-commerce.
Hemos pasado de ser una marca más de la compañía, a ser la submarca que está compitiendo al mismo nivel que la marca principal y sus competidores de primer grado.
Esta situación también queda reflejada en nuestro índice de visibilidad de Sistrix y en el tráfico orgánico que ha generado el proyecto.
Cuando comenzamos con esta andadura, rondaba las 600 sesiones orgánicas al mes y a fecha de hoy hablamos de casi 20 000 sesiones orgánicas al mes e incrementando.
Cierto es que hemos seguido innovando y creando nuevas estrategias en el proyecto, las cuales nos hacen crecer día a día.
Sin embargo, no podemos olvidarnos de lo que realmente nos hizo despegar y diferenciarnos del resto de webs de la compañía: el trabajo 100% de análisis y una buena definición de nuestro enlazado interno, donde distribuimos de forma concienciada nuestra popularidad interna.
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