Ante tus ojos tienes esa página de tu web que se resiste a mejorar su posición en los resultados de búsqueda de Google. ¿Qué hago? ¿Por dónde empiezo? ¿En qué aspectos debo centrar la optimización SEO de esa página para que remonte el vuelo? Muchas preguntas que, en ocasiones, no hayan la respuesta deseada.

Como en todo juego, los participantes deben cumplir las reglas. En el terreno del posicionamiento en buscadores las reglas las marca Google, sus Directrices de Calidad y las actualizaciones de su algoritmo. Teniendo presente estos factores, ahora toca pasar a la acción. Sigue esta hoja de ruta.

Palabras clave

La elección de la palabra clave es crucial al optimizar una página, de hecho, esa keyword maestra debe encabezar el título de nuestra página, cobrando una enorme relevancia. Asimismo, en el título se debe atrapar el usuario dándolo todo. En este punto, son muy recomendables los titulares que formulan preguntas, crean listas, anuncian una guía, etc.

Uso de etiquetas y sinónimos en la redacción del contenido

La relevancia a la palabra clave escogida requiere del uso de etiquetas <h1> <h2> <h3>, a lo largo del contenido, siendo esencial que esa keyword se muestre entre las primeras 150 palabras contextualizando toda la información de dicho contenido. Pero, ¿solo uso esa keyword?, te preguntarás. Muchas salsas requieren de varios ingredientes para estar más sabrosas. En la redacción SEO pasa lo mismo, siendo los sinónimos los acompañantes perfectos para optimizar con naturalidad ese contenido al tiempo que lo enriquecen.

Textos más largos

Además, no te cortes. Para Google el tamaño de nuestros contenidos importa ya que en un texto más extenso podrás ofrecer más información de valor a los usuarios, siendo un aspecto clave en la optimización SEO de tu página.

[thrive_lead_lock id=’17528′]Hidden Content[/thrive_lead_lock]

URLs amigables y descriptivas

Eso sí, revisa las URLs de cada página. Escoge entre 3 a 5 palabras que describan el contenido de esa página y nómbrala, evitando páginas con direcciones kilométricas sin sentido.

Bienvenido a la era multimedia

El contenido debe integrar varios formatos, más allá del puramente textual. Incorpora imágenes de calidad, vídeos y podcasts que aumenten el atractivo de la página y el tiempo de permanencia en ella.

Enlaza bien y vencerás

En la redacción digital los enlaces son esenciales porque vinculan contenidos relacionados favoreciendo la usabilidad web al tiempo que frenan la tasa de abandono. Utilízalos tanto para enlazar con otros contenidos de tu web como incluyendo links externos a páginas de referencia.

Be social!

Las redes sociales deben estar integradas en tu página porque el usuario no solo comprobará que estás presente en varias redes, sino que le facilitarás que comparta ese contenido que responde a sus intereses.

Diseño responsive

En todo este escenario no debemos pasar por alto un aspecto clave: la adaptación de nuestra página a dispositivos móviles. El diseño responsive no es ya una opción, es una necesidad y más si tenemos presente el reciente anuncio de Google que penalizará a partir del 21 de abril a todas las webs que no estén preparadas para móviles.

Rapidez de carga

Y, por último aunque no por ello menos importante, comprueba la velocidad de carga de tu página desde cualquier dispositivo. Si tarda más de 3 segundos en cargar, ¡S.O.S!

Ahora toca remangarse y trabajar. Ponte manos a la obra y ¡notarás el cambio!

Fuente: Luis Cifuentes